La Laguna Rodrigo de Freitas se distingue por el paisaje y está rodeada por lujosos edificios que aprovechan esa vista maravillosa de una zona exclusiva de Río de Janeiro. Pero ayer fue la sede del ridículo del remo brasileño, porque la vicepresidenta de la Federación Internacional de Remo (FISA), Anita de Frantz, se apareció de sorpresa y le puso los puntos a Brasil, que no pudo evitar la sospecha de un boicot hacia los demás países por la falta de entrega de botes.
Entre el año pasado y principios de éste, la Confederación Brasileña de Remo (CBR) le envió a la Asociación Argentina (AAR) y a las de otros países varios correos electrónicos en los que ofrecía botes para los participantes. Esto es habitual en eventos importantes, tal como sucedió en los Odesur.
"Desde la Asociación respondimos por el mismo medio a la CBR y a su presidente, Rodney de Araujo, y les pedimos varios botes. Pero jamás nos contestaron. Ni siquiera cuando los llamamos por teléfono. Nunca nos respondieron", le contó a Clarín la vicepresidenta de la AAR, Leticia Flores de González.
Cuando la delegación arribó a Río de Janeiro, no estaban los bo tes pedidos. Y Argentina estalló. Claro que el enojo se transformó en sospecha de boicot cuando otros países se sumaron: Canadá, Guatemala, Venezuela, El Salvador y Cuba, país a los que les tuvieron los botes retenidos en la aduana durante una semana.
Los países se juntaron y les avisaron a la FISA, que se movió rapidísimo. El miércoles llegaron dos inspectores, el jueves pisó Río la canadiense Guylaine Bernier, árbitro general a nivel panamericano y ayer llegó la abogada estadounidense De Frantz, miembro COI desde 1986.
Para los Juegos Panamericanos, Brasil compró una flota de 70 botes y, por ejemplo, cuenta con cuatro singles, mientras que Santiago Fernández correrá la final del single scull con uno de 1995.
Ayer, el Pollo logró el mejor tiempo de las dos series. En regatas corridas sólo para definir la calle de salida en la final, Gabriela Best -que tiene como único auspiciante al negocio de videojuegos de su padre- fue tercera en el single y Damián Ordás y Alan San Martín, sextos en el dos sin timonel. Mientras, Mario Cejas y Juan Campassi no llegaron a la final del doble peso ligero por haber quedado terceros en el repechaje.
Brasil, en tanto, pasó vergüenza por el reto de una peso pesado de la FISA. Esta vez le tocó sentir el ridículo en su propia casa.
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